Por estas páginas han pasado muchos profesionales que canalizan su pulsión artística mediante la arquitectura, el interiorismo o la decoración. En tu caso, ejerces ambas facetas. ¿Cómo se relacionan entre ellas? ¿Cuál se impone? Ambas facetas están muy conectadas entre sí, más que imponerse una sobre otra podríamos decir que son una síntesis y no concibo una sin la otra. Constantemente estoy ideando nuevos proyectos porque me considero una persona muy creativa. En ocasiones me llevo las gamas cromáticas y estudio de color al lienzo, y en otras lo incluimos en proyectos de interiorismo. Es lo divertido de ambas profesiones y con lo que disfruto: poder expresarme con libertad.
Aunque tu obra es aclamada en todo el mundo, sigues manteniendo tu estudio en Lucena (Córdoba), donde incluso has sido comisario de la Sala de Exposiciones del Ayuntamiento. ¿Te sientes profeta en tu tierra? ¿Lo cambiarías por la urbe de moda del momento? Lucena es mi ciudad, donde tengo mis raíces y mi trabajo. Considero que cada reconocimiento que se me hace a nivel profesional es también un mérito para mi tierra. Disfruto enormemente representándola y habitualmente me lo agradecen, por lo que me siento muy agradecido. Desde mis inicios he apostado por Lucena, tenemos allí nuestro estudio y showroom, además de mi lugar de creación. Mi ciudad me transmite paz y tranquilidad, elementos fundamentales para mi proceso creativo. No obstante, por cantidad de población y proyección, es cierto que en ciudades como Madrid, Berlín, Roma, París y otras grandes capitales tendría más visibilidad.
Tu socia en esta aventura es la interiorista Mónica Bartolessis, junto con la que habéis triunfado en eventos como Casa Decor. ¿Cómo os organizáis a la hora de trabajar? Ambos nos complementamos muy bien, como ha quedado corroborado durante todos los años que llevamos trabajando juntos. Intentamos combinar nuestra profesión con la visita constante a otros países, ferias y compañeros, para seguir formándonos y estando al corriente de las tendencias. Ahora hemos dado un paso más en nuestras carreras y hemos decidido fusionar nuestros nombres creando el Studio Möph para unificar nuestros proyectos.
Has recibido decenas de premios en los últimos años y tu obra está en las mejores galerías, salas de exposiciones y museos. Incluso llegaste a colaborar con uno de tus mayores referentes, el gran Antonio López. ¿Cuál es para ti el mejor reconocimiento? El mejor reconocimiento como interioristas es ver cómo los clientes siguen apostando por el trabajo que hacemos Mónica y yo. Como artista, a nivel personal, es muy satisfactorio ver cómo siguen colgando mis obras y, en cierto modo, presumiendo de ellas por redes sociales. En ambos aspectos profesionales nunca se para de crecer ni de aprender y seguiré haciéndolo cada día, pero manteniendo las señas de identidad que me han llevado hasta aquí.
Tu obra se puede ver también en el restaurante Tragabuches que el chef Dani García tiene en Marbella. ¿Te atraen los proyectos relacionados con la gastronomía? Dani García y Marbella es una señal de garantía y sabemos que hay un gran proyecto detrás. Para nosotros ha sido un honor participar en este proyecto de la mano de NOVOCUADRO ART COMPANY, una empresa con la que mantengo una estrecha colaboración y que comercializa muchas de mis obras desde hace años. El ámbito gastronómico me resulta muy interesante, desde el estudio pensamos que un buen proyecto de interiorismo es la mejor carta de presentación para estos espacios y son una experiencia visual que termina fusionándose con el paladar. Actualmente, se está poniendo de moda experimentar con esa fusión interiorismo-gastronomía y son numerosos los espacios que dedican sus esfuerzos a mejorar sus instalaciones. Aunque queda mucho por hacer, sobre todo en temas de iluminación o acústica.
En tu faceta de interiorista, hay una clara apuesta por el minimalismo, los materiales naturales y orgánicos, la artesanía… ¿Huyes del interiorismo-espectáculo? En el Studio Möph nos caracterizamos por realizar proyectos atemporales y que hagan que el cliente se sienta cómodo y a gusto, tanto si se trata de un espacio residencial como de uno público. Es cierto que, cuando tenemos un proyecto más a corto plazo, como ferias o stands, solemos apostar por un lenguaje más atrevido que en otro tipo de trabajos, ya que se trata de obras efímeras de las que finalmente queda el recuerdo de aquello que llama la atención.
Por último, ¿hay algún proyecto reciente que te gustaría compartir con nuestros lectores? Actualmente tengo varias exposiciones cerradas en Colonia, París y Milán, principales ferias europeas de decoración, fruto de mi colaboración con NOVOCUADRO ART COMPANY y estoy realizando obras para distintos espacios privados. Con el estudio estamos trabajando simultáneamente en espacios residenciales y públicos por diferentes zonas de España. Este año esperamos ultimar algunos de ellos y poder dar a conocer el trabajo que hemos realizado.